Falling Apart (Privado)

*No sabia lo que le pasaba...sentir a su hermano cerca le agradaba...pero sabía que tarde o temprano...se iría de nuevo...se iria...puede que le ejase de lado...pero...al menos estaba seguro de que sería feliz...sacudió un poco la cabeza...quitandose los malo pensamientos de ella...no sabia si estar contento, feliz, deprimido...o un poco de todo...de pronto sintió que lo miraba...y este le devolvio la mirada y le sonrió...seguramente se había dado cuenta de sus actos...*

-Ya casi estamos...*Dijo mirando hacia adelante señalando una casa blanca...con un jardin que era adornado por un lindo arbol...se acercaron a la puerta la cual abrio Kirara entrando dentro y dejando pasar a su hermano...*

-Espero que te guste...*Le sonrie...*

No termino de entender en qué era en lo que pensaba como para dibujar esa expresión en su rostro, pero más vale lo dejo así, si no me lo dijo es porque no quiere que lo sepa y lo mejor es no insistir; luego de que me señala su casa caminamos unos cuantos metros más hasta llegar a destino. Abre la puerta y me deja pasar.

-Permiso- pido ingresando al hogar, dejando mi maleta en el suelo; es un lugar precioso, mucho, incluso tan bello como... No, debo quitarlo de mi mente, o al menos no pensar tanto en él, pero es difícil, no hay momento en el día en que no piense en él, no puedo evitar hacerlo- Si, me gusta- respondo algo desganado, no es que no me agrade el lugar, en verdad me encanta, pero me cuesta acostumbrarme al hecho de que estaré alejado de mi Deo.

-Muchas gracias hermano, por ayudarme- exclamo volteándole, viéndole a los ojos para luego acercarme a él y abrazarlo, quizás buscando protección, quizás cariño, no lo se exactamente; necesito sentirlo, el agradable calor que emana, mucho más agradable a todo el que yo pudiese siquiera pensar en elaborar, un calor hecho por amor.

-Ya sabes que no tienes por que agradecer...es tonto que me des las gracias por abrir las puerta de tu casa...*Sonrie devolviendole el tierno abrazo...quedandose asi un rato...*

-Estare siempre a tu lado...para lo que necesites...*Sonrie alejandose...* Ahora...sera mejor que descanses...*Lo agarra de la mano llevandole al piso de arriba mostrandole una habitacion bastante espaciosa...*

-Al menos que prefieras comer algo...nunca biene mal comer...ya sabes..."Barriguita llena...Corazon contento"* Le sonrie como siempre tiernamente, soltandole de la mano*

-Una cosa....*Le toma del menton...luego depositando sus manos a los lados de la cara...* Una buena sonrisa...siempre ayuda en situaciones dificiles...*Le besa en la mejilla...* Estaré abajo...si quieres comer solo tienes que bajar...sino...descansa...

*Empieza a bajar las escaleras...*

Luego de escuchar sus palabras y verle bajar las escaleras ingreso a la habitación, recostándome boca abajo en la cama y cerrando los ojos. Comer, ja, ya ni hambre tengo por culpa de... No, no es su culpa, la culpa es mía por haberme hecho falsas iluciones, por haberle creido cuando dijo que me amaba y en realidad solo le interesaba jugar conmigo, fueron solo cosas de un par de noches y luego ya fue, borrón y cuenta nueva. De mis ojos nuevamente comienzan a manar las lágrimas, soy un imbécil, quien me viera aquí, uno de los más importantes demonios, o al menos eso tengo entendido ser, llorando por amor como si fuese un ángel o un simple humano.

-Maldigo el día en que te conocí Deo Canace- susurro entre dientes presa de la descepción, el enojo y el dolor que permanecen latentes aún, los demonios no tenemos derecho a enamorarnos y esto es lo que ocurre cuando queremos propasarnos.

*Estaba en la cocina...preparando algo de comer...después de todo siempre había uno que otro angel que pasaba por allí a pasar la noche...y el no se lo negaba...terminó de hacer algunas cosas...las demás las dejo al fuego...y se sentó en la mesa de la cocina apoyando su frente en sus antebrazos abatido...*

-Verle asi...es tan...*Comenzó a llorar...era duro...muy duro...sobre todo si agregabamos esos pequeños sentimientos que poco a poco se apoderaba de su ser...un sentimiento estupido...estupido en una situacion como esta...*

*De repente se incorpora y limpia sus lagrimas apagando el fuego y dejando todo listo...*

-Será mejor que no me acerque mucho...que no lo moleste...ya esta sufriendo mucho por ahora...*Decidió sirbiendo una racion en un plato...para luego comenzar a subir las escaleras y llegar a la puerta en donde se encontraba su hermano...tocando en esta...*

-Ukyo...*Susurra...* ¿Puedo pasar?....*No obtiene respuesta...así que decide quedarse fuera...*

-Bueno...no importa...*Hace una pausa depositando la comida en el suelo al frente de la puerta...* Aque te dejo la comida...si te apetece....*HAce una pausa mas grande pegando su frente a la puerta...* Solo...intenta no pensar mucho....en "eso".....

Escucho la voz debil de Kirara, de seguro por la distancia a la que se encuentra se oye así. Estoy por gritarse cualquier cosa, lo que mi ser quisiera expresar en ese momento, pero logro detenerme a tiempo ya que si vamos al caso él no tiene nada que ver, sino todo lo contrario, de no haber sido por él no se lo que sería de mi en este momento; por eso me limito a no contestar nada, tampoco hago nada, solo me quedo recostado en la cama, derramándo lágrimas silenciosas como si fuere un tierno ukesito que es traicionado, yo mismo me doy asco en estos momentos al verme aquí en esta condición tan deplorable.

-No tengo hambre.

Susurro con voz quebrada, bastante ahogada, tono que dudo hubiese podido alcanzar a oír debido al bajo volumen con que las pronuncio y a la distancia en que nos encontramos, pero no me siento en condiciones de hablar de otra forma.